La historia del trencito se
remonta a principios del
siglo XX en el Jardín
Zoológico de la Ciudad de
Buenos Aires. El 24 de julio
de 1908 el Concejo
Deliberante autorizó el
llamado a licitación pública
para la construcción de un
pequeño ferrocarril en el
Jardín Zoológico. El
trencito fue inaugurado en
el año 1909 para alegría de
todos.
En 1929 el tren se traslada
al Parque Avellaneda ya que
resultaba más atractivo por
el carácter de espacio
público y por las ventajas
que reportaba a los
concurrentes al campo de
deportes. En 1931, se
adjudicó la licitación a
Juan Cugusi, de origen
genovés, con la condición de
pasear gratis a los niños de
la colonia los lunes,
miércoles y viernes durante
el lapso de dos horas cada
día.
En 1936 se concretó su
inauguración oficial, se lo
denominó “Expreso Alegría”.
Con el paso del tiempo, en
la década del 1950, se
agregaron dos locomotoras
diesel de origen británico
construidas por la casa
“Ruston & Hornsby”. Esta
incorporación se debió al
singular aumento de
pasajeros transportados que
hizo necesario el empleo de
locomotoras más potentes y
coches con mayor capacidad.
Fue la época en la que el
trencito gozó de mayor
popularidad y en la que su
rasgo principal fue la falta
de techo en sus vagones y
locomotora.
El 11 de mayo de 1998, se
suspendió su funcionamiento
debido al deficiente estado
de conservación de las vías,
durmientes, locomotoras y
vagones. El 13 de mayo del
2006 fue reinaugurado, y al
cabo de algunos meses de
funcionamiento se decidió
volverlo a detener para
realizarle algunas mejoras.
El regreso del tren
Los trabajos de recuperación
del tren estuvieron
vinculados a la construcción
de un galpón para su guarda,
vereda perimetral,
iluminación y tendido
ferroviario con tres desvíos
manuales para su ingreso y
egreso. Además, se
instalaron desagües en
lugares centrales de su
trayecto y se compactaron
los suelos para atenuar los
efectos de las lluvias
intensas que impiden su
normal funcionamiento.
Su recorrido actual, de
1.300 metros, parte desde la
estación Clemente Onelli y
comprende un paseo por los
edificios y rincones más
significativos que
contemplan la vida del
parque en su ambiente
natural, cultural, social e
histórico. Así se recorrerá
la Casona de los Olivera, el
Jardín de la Meditación, el
Antiguo Natatorio, la
Calesita, el Tambo, la
muestra de esculturas al
aire libre y la gran
variedad de árboles,
arbustos y aves existentes.
Luego de la finalización de
las obras de mantenimiento
del tren histórico de Parque
Avellaneda, el servicio
retomó su marcha habitual.
Su horario de funcionamiento
es de miércoles a sábados
entre las 15 hs y las 19 hs
y los domingos de 10 hs a 19
hs.
Carlos Davis